Toda novela comienza con un elemento principal: LA IDEA, y
una idea no es más que un chispazo producido por una imagen, una frase, una
melodía, un aroma o una sensación que nos haya llegado de forma repentina.
Una idea literaria puede nacer cuando escuchamos música,
vemos la televisión, leemos un libro o caminamos por la calle, incluso,
mientras hacemos los quehaceres de la casa, estudiamos, escuchamos a otros,
etc. Puede llegar de maneras diferentes y en ocasiones diversas.
La idea de EL DESEO
DEL DRAGÓN nació de una reflexión.
En el 2006 mi vida dio un cambio total. Quedé embarazada,
por primera vez. No solo hubo un cambio físico en mí, sino también mental y
emotivo. Me sentía más susceptible e inquieta. Leía mucho, sobre todo artículos
de crianza y cuidados de bebés, pero también tuve una fascinación especial por
el romance paranormal. Ward, Kenyon, Cole, Briggs, Harris y Rice fueron algunas
de las que leí. Todas tenían algo en común, sus personajes masculinos eran fuertes,
muy fuertes, y sexys, pero también traumados. Tenían errores e intentaban vivir
con ellos, nada los satisfacía y ansiaban con intensidad que sus realidades
cambiaran.
Los dramas que ellas exponían en sus obras se mezclaron con
las nuevas preocupaciones que me embargaban: ¿cómo cuidar de mi hijo para que
creciera sano y fuerte? ¿Cómo debía criarlo para que fuera un chico de bien,
con personalidad? ¿Cómo evitar consentirlo mucho o amarlo poco? En fin, dudas
que creo le llegan a todas las madres primerizas que quieren hacer bien su
trabajo.
Tanta lectura y
reflexión me llevó a preguntarme: ¿Qué pasaría si… un hombre, que termina
siendo un sujeto malo por fallas en su crianza, se enamora de una mujer que
podría significar su condena definitiva?
Esas reflexiones comenzaron a trazar en mi cabeza una idea,
que luego fue tomando forma con el paso de los meses: un hombre fuerte, muy
fuerte, aunque no por méritos sobrenaturales, y sexy, muy sexy, cuyo trauma de
adulto fuera producto de una crianza defectuosa.
Así surgió IVÁN SARMIENTO, el protagonista, un hombre que tuvo
una niñez tan difícil que marcó cada aspecto de su personalidad adulta. Vivió entre
la miseria, fue testigo de la muerte cruel de ambos padres, fue perseguido por
criminales, estuvo en diferentes orfanatos que le prodigaron una crianza ruda y
sobrevivió durante su adolescencia en las calles siendo obligado a asesinar
para defenderse, y robar para poder comer.
A pocos metros de la entrada se encontraba el colegio San Juan, una institución educativa que funcionaba además, como albergue para jóvenes varones con problemas de conducta. Los chicos que vivían allí eran huérfanos o pertenecían a familias muy humildes que no podían mantenerlos. La mayoría poseía un carácter subversivo irrefrenable, que según los monjes que dirigían el lugar, para encauzar sus temperamentos era necesario un tratamiento tan rudo como sus personalidades.
Fragmento de LA MIRADA DEL DRAGÓN, novela que presenta a los personajes de EL DESEO DEL DRAGÓN.
Las causas injustas que siempre rodearon al niño huérfano y
rebelde, hicieron de él un delincuente de cuidado, especializado en el
sicariato, el secuestro y la tortura.
Ella no era como él. A pesar de la valentía con la que enfrentaba su soledad y sus pérdidas, Elena necesitaba del apoyo y del aliento de familiares y amigos. Ella sí había contado con una segunda familia que la adoptó y la recibió en su seno. Él, en cambio, tuvo que luchar en la calle y saltar de refugio en refugio, hasta que pudo valerse por sus propios medios.Fragmento de LA MIRADA DEL DRAGÓN, novela que presenta a los personajes de EL DESEO DEL DRAGÓN.
La primera novela que escribí sobre ese personaje: LA MIRADA DEL DRAGÓN, la autopubliqué a finales del 2012, pero me dejó tantas sensaciones
represadas en el pecho que me fue imposible quitármelo de la mente. Incluso a
mis lectores, que siempre me escribían pidiéndome más de IVÁN.
¿Cómo debe actuar un
hombre recién reconciliado con la vida? Fue mi duda al reflexionar cómo podía
darle continuidad a la historia de un personaje tan difícil que había logrado
encontrado su final feliz.
La primera novela fue muy difícil de llevar. Los traumas y
tipo de actuar de Iván exigían situaciones fuertes y delicadas, que si no eran bien
tratadas podían distanciarme mucho de la novela romántica, género en el que
deseaba enmarcarla. Pensar en una continuación me daba terror. Por eso el
proceso de reflexión duró unos cuantos meses.
Hasta que una lectora me envió una imagen que dice más que
miles de palabras, asegurándome que le hacía recordar a IVÁN SARMIENTO, y el
final sublime que tuvo en la primera novela.
Fue allí cuando
pensé: ¿Qué pasaría si… estuviera en peligro eso que tanto amas?
EL DESEO DEL DRAGÓN no es una continuación de LA MIRADA DEL
DRAGÓN, es otra historia centrada en los mismos personajes, pero que muestra
una trama distinta, que no tiene relación con la anterior. Por supuesto que en
la segunda se recuerda un poco lo vivido en el pasado, sin embargo, ambas
novelas pueden leerse de manera independiente.
No podía morir. No se dejaría vencer con facilidad.Nadie había logrado acabarlo mientras vivía en las calles como un simple delincuente, mucho menos lo harían ahora que tenía a cuatro increíbles personas bajo su cuidado, obsequiándole la fortaleza necesaria para sobrevivir. De alguna manera saldría de allí.Fragmento de EL DESEO DEL DRAGÓN.
Aquí exploré una faceta diferente de IVÁN, la de padre y
esposo, e intenté mostrar sus esfuerzos por proteger y mantener a su lado a los
seres que ama, de peligros muy similares a los enfrentados en su vida anterior.
Los cuida incluso, de sus propios errores (¿qué hombre, sexy o no, no tiene
errores?).
Llevaba seis años alejado del ambiente delictivo y criminal en el que había vivido.Desde que se unió a Elena intentaba seguir una existencia normal, como padre de familia y cabeza de un sólido hogar. Sin embargo, de vez en cuando aceptaba uno que otro trabajito como detective para mantener a raya sus nervios.Para un sujeto como él, que desde los ocho años se había dedicado a sobrevivir en las calles, sumergido en la violencia, apartarlo de ese lugar no era tarea fácil.Fragmento de EL DESEO DEL DRAGÓN.
¿Has tenido ideas que no dejan de dar vueltas en tu cabeza y
te roban horas de sueño y hasta la tranquilidad?
No dejes de conocer a IVÁN SARMIENTO y la intensa historia
de amor que he creado para él en: EL DESEO DEL DRAGÓN. Búscala en Amazon.
Jo, es una gozada cuando un escritor comparte su proceso de escritura, nos permites formar parte de esos entresijos, casi mágicos, de cada creación. Un abrazo
ResponderEliminarJo, es una gozada cuando un escritor comparte su proceso de escritura, nos permites formar parte de esos entresijos, casi mágicos, de cada creación. Un abrazo
ResponderEliminarPues a veces, de hecho una novela que comencé a escribir surgió por el intermedio y casi final de la trama jeje lo primero que me imaginé fue una escena de un conflicto y negación y de ahí partí hacia atrás... A lo que eran esas personas y a las cosas por las que habían pasado para llegar hasta ese punto.
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